Con este trabajo damos inicio a un nuevo ciclo titulado “Nuestras Historias Rurales”.
El mismo pretende rescatar historias relacionadas con nuestras caminos de tierra, que pueden estar contenidas en una colonia o en espacios del campo como puede ser una escuela, capilla, boliche u otros sitios que permitieron o permiten a personas y/o familias, que conforman una población dispersa en un amplio espacio, el encuentro social y la construcción de historias colectivas impregnadas por la colaboración y el objetivo del disfrute, el intercambio y la adquisición de saberes.
En esta etapa y debido a nuestras limitaciones estaremos recorriendo parte del Sudeste cordobés y Sudoeste santafesino para realizar una entrega quincenal o mensual.
Hacemos extensiva la invitación a toda persona o grupo que desee sumar sus conocimientos y compartir su parte de la historia. Asumiendo de nuestra parte el compromiso de responder al pedido de dicho aporte para ir completando el tablero de “Nuestras Historias Rurales” (Agosto de 2025)
Hoy Visitamos la Escuela “Luis Piedrabuena”.
La Escuela “Luis Piedrabuena” se encuentra ubicada en Colonia Garibaldi distante 11 Km al Sur de la localidad de General Roca, provincia de Córdoba.
Un dato a tener en cuenta es que el nombre de este y numerosos establecimientos educativos del país que lo llevan, se debe a un marino argentino, nacido en Carmen de Patagones en 1833 y muerto en Buenos Aires, en 1883.
Piedrabuena custodió los vastos territorios del sur de nuestro país, exploró los canales fueguinos y acompañó expediciones científicas a la Patagonia austral haciendo sede en la Isla de los Estados como centro de observación.
La historia de esta escuela se remonta al 15 de julio de 1949 cuando abría sus puertas como Escuela Nacional N*280 en un pequeño local propiedad de un vecino de la zona. Anteriormente, hijas e hijos de colonos y peones rurales asistían a clases particulares al campo de los dueños del único almacén de Ramos Generales de la colonia. En mayo de 1952, la escuela fue trasladada a la vivienda de otro propietario rural y allí funcionó con un elevado número de alumnos, hasta que, tal como se lee en la placa recordatoria, el 11 de noviembre de 1962, comenzó a construirse el actual edificio que hoy estamos recorriendo. El vecindario mantuvo siempre el interés por atender esta necesidad educativa y es por ello que se formó en ese momento, una asociación cooperadora, cuyos integrantes se recuerdan en la placa. Gracias al esfuerzo y al arduo trabajo, lograron culminar la obra, el 30 de mayo de 1965. En ese año se le asignó a la misma el nombre de “Luis Piedrabuena” y el 26 de junio se procedió al acto inaugural.
El Estado se hace presente en lugares donde no hay otro espacio público y lo pone a disposición de los habitantes dispersos por el campo, personas que se encuentran sometidas a las transformaciones demográficas y socio productivas lo que genera que la población de las zonas rurales sea mucho más reducida en la actualidad. Esta situación produjo un cierre temporario del establecimiento a comienzos de la década del 80 y en 1982 se reiniciaron las actividades.
Desde aquellos días hasta hoy padres, docentes, alumnos y vecinos, siguen enfrentando el desafío no sólo de acercar la educación a niños y niñas de la zona, sino también fortalecer el sentido de pertenencia a la comunidad…
Aún hoy, en la memoria de quienes pasaron por estas aulas, están presentes los almuerzos y bailes que se realizaban con la actuación de importantes orquestas. Un ex alumno, egresado por aquellos años, registra en sus recuerdos el gran “Baile del Agricultor” que se realizó para la inauguración del edificio y que contó con la actuación del famoso conjunto “La Leo”. En estos eventos la escuela actuaba como centro esencial de la vida social.
Ricas comidas, bailes, juegos camperos de tabas, bochas y cartas impregnaban a los festejos su rasgo de identidad. Ese trabajo entusiasta de fortalecimiento sigue intacto y lo demuestra la permanencia en el tiempo de la realización de estas fiestas que continúan llevándose a cabo.
Cada 8 de septiembre se conmemora, en nuestro país, el “Día del Agricultor” y la PIEDRABUENA lo sigue celebrando con Peñas donde acuden pobladores de esta zona rural, de localidades vecinas y artistas convocados para animar estas fiestas.
El origen de la colonia y su poblamiento está ligado a la inmigración europea.
En el diario rosarino El Independiente del 14 de septiembre de 1881 podemos leer:
“Colonia Garibaldi. En un fértil terreno propiedad de la señora viuda del General Urquiza, que linda con el sud de la Colonia Tortugas, se acaba de formar una nueva con el nombre de Garibaldi.
Su fundador es el señor Laprade y administrador Don Pablo Villoz, honorable y progresista vecino de Tortugas.
La colonia Garibaldi está compuesta de 121 concesiones, divididas así: 1 de 38 cuadras, 10 de 32, 10 de 30 y 100 de 25; las que hacen un total de 3.158 cuadras cuadradas, con exclusión de los caminos vecinales (…).”
Aquí nos parece pertinente recordar que el Arroyo Tortugas marca el límite geográfico entre las provincias de Santa Fe y Córdoba. La estación del ferrocarril Tortugas, instalada en 1866, está ubicada en territorio santafesino al Este de dicho arroyo y al Oeste del mismo, en territorio cordobés se estableció en el año 1870 la Colonia Tortugas, en cuyos terrenos se construyó la Estación del ferrocarril General Roca, que fue habilitada al servicio público 2 años después de la creación de la Colonia Garibaldi.
El artículo publicado en el diario El Municipio con fecha 19 de junio de 1889 no ilustra al respecto.
“Remates Alvarado y Puccio. 100 cuadras cuadradas. En la importante colonia Garibaldi y a una legua al sud(o sea 5 kilómetros) de la estación General Roca, del ferro-carril Central Argentino. (…) Venderemos al más alto precio y sin base alguna 100 cuadras cuadradas de terrenos de 150 por 150 teniendo 25 cuadras labradas, lindando por el norte con Juan Miotti; al oeste con Delfina Carballo; al sud con los señores Graves Hermanos y al este con los señores Turicheo Hermanos. (…)”
Coordinación: Héctor Decándido
Grabación y edición: David Robledo
Fotografía: Leonardo Cristófoli
Voces: Claudia Cerón
Adriana Palmieri
Participantes:
Rocío Orellana (Docente)
María Alejandra Perez (Ex-docente)
Verónica Barberis
Silvina Crudeli
Julián Piclú
Modesto Siara