Presentamos un nuevo capítulo del ciclo titulado “Nuestras Historias Rurales”. En esta ocasión le traemos la historia de una escuela de campo llamada “Carlos Guido y Spano”, que abrió sus puertas el 2 de abril de 1954, para dar respuesta a la creciente necesidad de las familias que habitaban esa parte de la ruralidad, alejada de los centros urbanos.
Escuela Carlos Guido y Spano
En campos de la llamada “Colonia Maizales” y 22 km al norte de la ciudad de Leones se halla ubicado el edificio donde funcionó la escuela Carlos Guido y Spano. La misma permanece cerrada desde hace varios años, pero es poseedora de una rica historia que merece ser compartida.
Para conocer su legado nos llegamos hasta dicha ciudad, donde nos encontrarnos con ex docentes y ex alumnos que pasaron por ese establecimiento educativo y han conservado hasta la actualidad los recuerdos imborrables de un tiempo ya transcurrido. Estas personas nos facilitaron toda la información necesaria para armar un nuevo capítulo de Nuestras Historias Rurales.
Para 1950 la población rural de esta zona era muy numerosa y el acceso a la educación pública y gratuita comenzó a ser un reclamo impostergable. Las familias campesinas comenzaron a organizarse para darle una solución a la creciente necesidad de brindarles a sus hijos un espacio comunitario de contención, dentro de un aula con docente a cargo, para poder completar el ciclo escolar básico.
Con este objetivo le solicitan al Estado argentino la habilitación de una escuela primaria y pública para los niños en edad escolar que habitaban esta parte de la ruralidad, alejada de los centros urbanos. Así nació la Escuela Nacional Nº511, que comenzó funcionando en una vivienda cedida por los señores Jorge y Nicolás Gamulín. Este establecimiento educativo abrió sus puertas el 2 de abril de 1954, con una matrícula de 26 alumnos.
Hacia 1960 surgió, entre la Asociación Cooperadora y los vecinos, la inquietud de construir un edificio propio y para 1967 se consiguió la donación del terreno donde al año siguiente se comenzó a construir el nuevo local escolar que fue inaugurado el 30 de mayo de 1970. La obra se llevó a cabo gracias a la Asociación Cooperadora, vecinos e instituciones de la ciudad de Leones y un aporte del Consejo Nacional de Educación. En estos años la escuela fue el albergue del Club Rural 4 A El Hornero, promovido por el I.N.T.A. Marcos Juárez para brindar asesoramiento agropecuario a ex alumnos, alumnos mayores y vecinos de la zona.
La cantidad de alumnos fue aumentando y la asociación Cooperadora siguió colaborando con la mantención y mejora del edificio donde en 1979 se festejaron sus Bodas de Plata, con un emotivo acto, que culminó con una cena en un galpón cercano cedido por Armando Grilli, que era utilizado desde los años ´70 para diversos eventos organizados por la escuela, como por ejemplo un baile o un campeonato de bochas.
En 1980 y por sugerencia de la Asesoría Técnica Docente, este establecimiento educativo pasó a llamarse Escuela Carlos Guido y Spano. Haciendo un homenaje al poeta argentino cuya obra se inscribe dentro del Romanticismo. Nos parece oportuno rescatar que fue vocal del Consejo Nacional de Educación, cofundador de la Sociedad Protectora de Animales y Director de la Biblioteca Nacional. Su vida pública fue contemporánea a la de Juan Bautista Alberdi, José Hernández y Bartolomé Mitre, quien ordenó la detención de Guido y Spano por el hecho de haberse opuesto públicamente a la guerra contra el Paraguay. Es decir estamos hablando de un poeta comprometido con sus ideales, que se opuso a la violencia contra nuestros hermanos paraguayos.
En 1985 y a pocos metros del edificio escolar, se construyó un salón que cuenta con una superficie cubierta de 150 metros cuadrados, para uso exclusivo de la comunidad educativa. El mismo pasó a ser un lugar de encuentro, para padres, madres, ex alumnos, vecinos y docentes que no escatimaban esfuerzos para facilitar la realización de todas las actividades y grandes veladas organizadas por la “Guido y Spano”.
Atentos a las crecientes necesidades de la población rural, en el año 1988 se habilitó también un Jardín de infantes para contener a los más pequeños. La escuela iba cobrando protagonismo pero la población rural comenzaba a declinar en los últimos años del siglo XX. Finalmente y debido a los recortes al sistema educativo incluidos en el presupuesto provincial, en 1996 el Nivel Inicial fue cerrado.
La escuela primaria siguió funcionando pero un fenómeno climático comenzaba a emerger, dificultando la permanencia en la zona de la población rural. Las inundaciones comenzaron a ser un obstáculo cada vez mayor para transitar las calles de tierra y llegar hasta la escuela. La cantidad de alumnos fue disminuyendo y luego de 56 años de vida, la “Guido y Spano” finalmente cerró sus puertas en 2010.
Hoy visitamos este edificio escolar que fue testigo de una historia muy rica en sueños y emociones compartidas. Todos recuerdan la casa de la familia Bollatti ubicada frente a la escuela y lugar de refugio en tiempos de lluvias, hasta que los padres buscaran a sus hijos. A la docente o agricultor que tenía auto y pasaba a recoger alumnos por las tranqueras. A los niños llegando a caballo o en bicicleta, o los sulkis convertidos en un vehículo colectivo de movilidad.
Los tiempos de la Comunión y la Confirmación, cuya preparación previa estaba a cargo de la docente o catequista de turno en dicha escuela de campo, hasta donde se llegaba un padre de la congregación de Don Bosco o alguno de la ciudad de Leones, para otorgar los sagrados sacramentos.
Los actos escolares y las distintas representaciones artísticas. Las fiestas de fin de año o el inicio de un nuevo ciclo lectivo. Los grandes almuerzos de la vaquillona deshuesada, que se prolongaban con entretenimientos hasta la puesta del sol.
El encuentro del año 2004 para festejar las Bodas de Oro de la escuela, desarrollado en la ciudad de Marcos Juárez y el del año 2014, llevado a cabo en el Club Sarmiento de Leones, para recordar los 60 años de su apertura.
El reencuentro de ex alumnos y ex docentes del año 2013, desarrollado en el Club Leones, o el del año 2025 con sede en el Círculo Católico Obrero de la ciudad de Leones.
Porque como dice León Gieco: “Todo está guardado en la memoria refugio de la vida y de la historia (…)”
Coordinación: Héctor Decándido
Grabación y Edición: David Robledo
Fotografía: Leonardo Cristófoli
Textos: Griselda Aimar, Claudia Cerón y Héctor Decándido
Voces: Claudia Cerón y Adriana Palmieri
Participantes:
Griselda María Aimar (ex docente)
Liliana Gladys Garetto (ex docente)
María Nélida Juárez (ex alumna y ex docente)
Verónica Grilli (ex alumna)
Carlos Gustavo Reale (ex alumno)